Bienvenidos,
Porque uno se decide a escribir un blog. En primer lugar, el deseo de comunicar. Una fuerza motriz que se expresa a través de la palabra o bien de los actos de palabra. A partir de esta primera idea me pregunto cuales son las fuerzas motrices que mueven nuestro mundo, el mundo de los humanos.
1. El deseo de comunicar
2. El deseo de amar
3. El deseo de crear
Comentando estas ideas iniciales con un interlocutor me comenta que el mundo se mueve por el deseo de poder y la ambición, y me parece que se establece un
contrapunto interesante entre ambos conjuntos de ideas. Nos comunicamos, amamos, creamos, pero hasta donde lo hacemos interdictados por el deseo del poder y la ambición. El procedimiento de interdicción está basado en la presunción de que toda posesión es legítima. Pongamos en cuestión esta premisa básica, acerca de que es lo que realmente poseemos. ¿La propiedad es privada, de que y hasta donde? ¿Y la propiedad colectiva, que podemos pensar sobre esta cuestión?
Tal vez una posible salida la señala el amor a la tarea, a lo que hacemos, como
profesionales, como amigos, como padres, me gusta la idea de trabajo. El trabajo
como algo que uno realiza desde uno mismo, desde adentro, pero que está destinado a otros. Se basa en el amor y también en el compromiso con la tarea.
También necesitamos del reconocimiento de los demás, pues bien, pero que al menos sea por el trabajo que realizamos y no solo por nuestro deseo de poder.
Este Blog esta destinado a un intercambio de ideas y propuestas de diferentes autores sobre temas vinculados a la salud, el arte y la sociedad desde una perspectiva interdisciplinar. Esperamos contar con vuestros aportes para esta iniciativa que pretende ser una ventana de comunicación y libertad de pensamiento.
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